La circularidad se ha convertido en un tema crítico en años recientes, pero reemplazar el plástico por otras alternativas puede ser más dañino para el medio ambiente de lo que se pensaba.
De acuerdo con una investigación de la Universidad de Sheffield, publicada en Environmental Science & Technology, la mayoría de las alternativas actualmente provocan mayores emisiones de gases de efecto invernadero (GEI).
¿Por qué el plástico emite menos gases contaminantes?
El estudio analizó 16 aplicaciones y encontró que, en 15 de ellas, los productos de plástico generan menores emisiones contaminantes en comparación con sus alternativas.
Al calcular los ciclos de vida de los diferentes materiales, los productos plásticos liberaban entre un 10 y un 90% menos de gases GEI, debido a que se requiere menos energía para su fabricación y transporte.
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Alternativas no son tan sustentables
El estudio realizado por el Dr. Fanran Meng del Departamento de Ingeniería Química y Biológica de Sheffield, en colaboración con investigadores de la Universidad de Cambridge y el Real Instituto de Tecnología KTH, analizó los plásticos y sus sustitutos en diversas aplicaciones, incluidos:
- Embalaje
- Construcción
- Automoción
- Textiles
- Bienes de consumo duraderos.
Para comprender los impactos ambientales, los investigadores utilizaron una herramienta llamada evaluación del ciclo de vida (LCA). Este método ayuda a comparar cómo los diferentes productos afectan el medio ambiente. El estudio adoptó un enfoque de ACV para evaluar las emisiones de GEI asociadas con productos plásticos versus alternativas en diferentes sectores.
Reemplazar el plástico no es la solución
Incluso cuando se centran únicamente en las emisiones directas del ciclo de vida, los plásticos mantienen su ventaja en nueve de cada 14 aplicaciones. Factores como la menor intensidad energética durante la producción y la eficiencia del peso de los plásticos contribuyen a reducir su huella medioambiental en comparación con alternativas como el vidrio o el metal.
«La reducción de la demanda, la optimización de la eficiencia, la extensión de la vida útil y la reutilización/reciclaje son estrategias beneficiosas para todos para reducir las emisiones de manera efectiva. Centrarse únicamente en cambiar a materiales alternativos no lo es», destacaron los investigadores.