Lego dio a conocer que continúa su búsqueda de alternativas sostenibles al plástico virgen, por lo que ha aumentado la inversión en materiales certificados según el método de balance de masa.
En 2023, el 18% de toda la resina que compró el fabricante de juguetes danés tenía la certificación ISCC Plus o RSB según los principios de equilibrio de masa, lo que se traduce en un promedio estimado del 12 % de fuentes atribuidas a energías renovables.
Lego dijo que planea “aumentar significativamente” su uso de materiales de balance de masa en 2024 y más allá. También espera obtener la certificación ISCC Plus por su uso de materiales de balance de masa este año, según su informe anual de 2023.
«No vemos el equilibrio de masa como una solución a largo plazo pero, por ahora, a medida que la tecnología en torno a materiales sostenibles continúa desarrollándose, creemos que es la mejor opción para estimular el mercado de materias primas, lo que a su vez nos ayudará a hacer nuestra productos más sostenibles”, señaló Lego en un comunicado del 6 de marzo.
Para estimular el mercado, Lego está tratando de influir en los fabricantes de plásticos certificados con masa equilibrada para que inviertan en una mayor capacidad de producción, dijo a Bloomberg el director general de la empresa, Niels B. Christiansen.
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El precio de esa estrategia es hasta un 70% más alto que el de comprar plásticos de origen fósil, pero Lego espera que su inversión ayude a acelerar el desarrollo de materiales más sostenibles.
«Ahora hemos decidido hacer un verdadero esfuerzo para influir en la industria y acelerar el ritmo de este desarrollo», mencionó Christiansen a Bloomberg. «Hoy en día no hay suficiente material en el mercado, pero a veces las cosas sólo suceden cuando los grandes actores como nosotros empezamos a pagar más por los materiales».
Cabe destacar que este anuncio se produce cuando Lego aumentó el gasto en iniciativas ambientales en un 60% en 2023 en comparación con 2022. El gasto acelerado en “iniciativas estratégicas”, entre otros factores, llevó a una disminución del 5% en el beneficio operativo a 17,1 mil millones de coronas danesas (2,29 mil millones). Christiansen dijo que estaba satisfecho con el desempeño de la compañía “dado que 2023 fue el mercado de juguetes más negativo en más de 15 años”.
De igual forma, la compañía se ha comprometido a invertir 1.400 millones de dólares en los cuatro años hasta 2025 en sostenibilidad. Christensen dijo a Bloomberg que Lego no trasladará a los clientes el mayor costo del plástico atribuido a las energías renovables. Él cree que los precios sostenibles de la resina se mantendrán altos durante años porque la demanda también crecerá a medida que aumente la oferta.
«Vamos a convertirnos en un comprador activo de estos productos certificados y ayudaremos a acelerar la industria hacia eso», dijo el director ejecutivo de Lego. «Ese dinero ahora está ayudando a crear cadenas de suministro que crean materiales más sostenibles y ecológicos y lo hacemos con la esperanza de que acelere el desarrollo».
«Probablemente pensábamos que era más fácil lograrlo, pero es un cambio gigantesco para una cadena de suministro de productos químicos con proveedores y subproveedores», añadió.
