Si bien, por una incorrecta disposición los plásticos llegan al mar con bastante facilidad luego de ser usados, acopiarlos es todo un reto, y un desafío mayor reciclarlos cuando esta materia prima se expone por largos periodos de tiempo a la intemperie. Para ayudar en la lucha contra la contaminación, se creó el Microsoft Ocean Plastic Mouse.
Al margen de cualquier dificultad técnica, el equipo de desarrollo de productos e ingenieros de Microsoft, junto con SABIC, líder mundial en la industria química, les dan una segunda vida a los residuos plásticos en los océanos.
Este proyecto, el cual derivó en la creación del Microsoft Ocean Plastic Mouse, dispositivo con un 20% de plástico oceánico reciclado en la cubierta exterior, demuestra una vez más que es posible el reciclaje del plástico recuperado del océano.
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A decir de Ulises Cabrera, gerente de Microsoft Surface México para empresas, “esto sucede cuando los socios de la cadena de valor utilizan sus conocimientos y trabajan juntos”.
Ingeniería para el reciclaje
Luego de un proceso de investigación y desarrollo (I+D), y habiendo superado la degradación del plástico oceánico como resultado de la exposición a la luz solar y al agua, SABIC creó la resina XENOY™, una solución que el fabricante con sede global en Arabia Saudita incorporó a su cartera TRUCIRCLE™.
Esta nueva resina con plástico reciclado del océano puede ayudar a reducir los residuos plásticos de Polietilén Tereftalato (PET) que, de manera irresponsable, llegan al mar.
El Microsoft Ocean Plastic Mouse es el primer producto de electrónica fabricado con XENOY™.
Cabe mencionar que Microsoft comenzó este proyecto como parte de su compromiso de lograr cero residuos para 2030, y demostrar la viabilidad del plástico oceánico reciclado como materia prima para su uso en electrónica.
