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Bactigon/KELT-7: el primer polímero que previene la formación de biopelículas bacterianas

La Universidad de Nottingham y la empresa británica de biotecnología Angel Guard desarrollaron Bactigon/KELT-7, considerado el primer polímero del mundo que reduce el riesgo de infecciones mortales sin la necesidad de antibióticos u otros agentes tóxicos difusibles.

El nuevo polímero, que previene la formación de biopelículas bacterianas en los sistemas de agua y otros productos, podría salvar miles de vidas, según investigadores de la Universidad de Nottingham en Inglaterra.

Bactigon/KELT-7

Bactigon/KELT-7 ha sido descrito como un polímero anti-biofilm y una herramienta clave no solo para proteger los sistemas de agua, donde se utilizará inicialmente, sino también como protección para la salud pública en general.


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De acuerdo con un mensaje a medios de la Universidad de Nottingham, sus especificaciones únicas permiten que se utilice como material de construcción de plástico que se puede aplicar mediante recubrimiento por pulverización, inmersión o técnicas de impresión 3D. Esta versatilidad amplía aún más la gama de posibles aplicaciones, según el comunicado.

A diferencia de los aditivos de plata y zinc, el nuevo polímero previene el crecimiento de biopelículas de patógenos bacterianos incluso cuando se sumerge en agua, lo que lo convierte en una opción atractiva para su uso en tuberías de agua, accesorios sanitarios, accesorios y sistemas de plomería, entre muchas otras aplicaciones.

Los retos de crear un nuevo polímero

Al comentar sobre la colaboración con Angel Guard, el profesor Derek Irvine, del departamento de química de materiales de la facultad de ingeniería de la universidad, dijo que permitió a los investigadores académicos “desarrollar parte de nuestra investigación fundamental que cambia el paradigma en un impacto en el mundo real. Es un ejemplo muy sólido de cómo la transferencia de conocimientos y el intercambio con la industria pueden tener beneficios para las personas de todo el mundo”.

Un desafío clave en el desarrollo del material fue encontrar un polímero anti-biopelícula que pudiera soportar altas temperaturas en línea con los procedimientos actuales de limpieza en caliente. El nuevo polímero duradero con propiedades antibiopelícula se diseñó y demostró que puede recubrir juntas tóricas utilizadas en sistemas de agua potable mediante un procedimiento simple de recubrimiento por inmersión.

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