De acuerdo con Juan José Martínez, gerente de planta de Corrugado Atlas de Smurfit Kappa, son muchas las reglas y las condiciones las que demandan los clientes para la producción de cajas y el embalaje.
Durante una visita guiada a la planta, ubicada en Tlalnepantla, Estado de México, el especialista en diseño y manufactura de cajas que, entre otras cosas, contendrán aparatos electrónicos, envases de vidrio, de plástico…, informó que, a fin de obtener la certificación BRC (British Retail Consortium, por sus siglas en inglés), que la multinacional Procter & Gamble solicitó recientemente, empezaron ya con la capacitación al personal técnico.
“De las peticiones hay muchos avances, puesto que contamos con todas las actualizaciones de la ISO 9000. Es importante mencionar que, desde 1994, nosotros apelamos a cuestiones de inocuidad, seguridad y procesos de manufactura”.
La auditoría se llevará a cabo durante el mes de diciembre, y Juan José Martínez espera que la planta opere con esta licencia –enfocada en la seguridad de alimentos– a partir de enero de 2020.
“Cada día hay modificaciones, siempre hay cambios. Con Procter & Gamble hemos trabajado por más de 40 años. La innovación es una constante en el mercado y nosotros nos adaptamos perfectamente”.
Con el propósito de aislar insectos, P&G pide a Smurfit Kappa implementar esclusas en todos los accesos. Otros de los requerimientos para obtener la British Retail Consortium es establecer una metodología, tanto en el lavado de las manos, como en la limpieza de los zapatos, y prohibir la entrada a las instalaciones con bilé o maquillaje.
El factor millenial
Cuando se trata del mercado y de la transformación en los procesos de negocio, además de los clientes, esos grandes corporativos, como P&G o Grupo Modelo, también están los millenials, una generación que consume a partir de consideraciones ambientales, y que Corrugado Atlas de Smurfit Kappa atiende a través del acopio y el reciclaje de sus productos.
