De acuerdo con el Anuario Estadístico 2021 de la Asociación Nacional de la Industria del Plástico (Anipac), la producción nacional de resinas plásticas es de 3.21 toneladas, de las cuales el 10.1% es de Poliestireno (PS).
“Eso significa un 5% menos respecto del volumen del año anterior”, señala Gerardo Pedra Rocha, fundador de la iniciativa “Recicla Unicel”. Como refiere el directivo, a nivel mundial, del 4-6% del petróleo consumido se destina a la fabricación de plástico y, bajo ese contexto, explica que el estireno es la materia prima para fabricar artículos acabados en Poliestireno. “Al igual que cualquier otro tipo de material plástico, el Poliestireno Expandible (EPS) deriva en último término del petróleo”.
Una de las grandes virtudes del PS, destaca el entrevistado, es “su versatilidad”, lo que le permite a este commodity ser utilizado en la fabricación de productos de diversas industrias.
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Gerardo Pedra también apunta que la distribución de consumo de este plástico se distribuye en PS-Extrusión, PS-Termoformado y PS-Inyección.
- PS-Extrusión, representa 45 mil toneladas, de las cuales se destina el 76.1% a laminados, el 14.1% a productos para la industria alimenticia y el 9.8% a consumo.
- PS-Termotransformado, representa 12 mil toneladas de consumo, el 78% se destina a envases y empaques, y el 22% a artículos del hogar.
- PS-Inyección, 44% se destina para la fabricación de electrodomésticos, el 17.8% para envases y empaques, el 6.2% para aparatos eléctricos y el 4.1% para equipos médicos.
El EPS, por su parte, se compone de 95% de aire y sólo 5% de plástico. Hoy en día, a decir del experto, del total de la producción nacional de EPS, el 76% se destina a la industria de la construcción y del embalaje, y el 26% a la industria de alimentos. Aunque la difusión de mitos alrededor del EPS ha provocado un incremento en el consumo de productos que lo sustituyan, “como los elaborados de material compostable, biodegradable o de papel”.
Esos cambios, comenta el ejecutivo, en realidad no ataca el problema de fondo, es decir, la correcta gestión de residuos, “pues cualquier material requiere de un proceso adecuado para su descomposición o reintegración a la cadena de valor productiva”.
Según datos de la Asociación Nacional de Industrias del Plástico, el consumo de EPS en México es de 125 mil toneladas al año, lo que equivale al 29.97% del total de la industria de Poliestireno en el país. De ese volumen, apenas se recupera entre el 8 y 10% del consumo, teniendo un reciclaje diario de 7 millones de piezas -platos, vasos, charolas, entre otros-. Además de 15 mil toneladas de reuso para la construcción y el 1% para su reutilización en nuevos productos, lo que ha mostrado un gran potencial para el desarrollo de una industria de reciclaje de Unicel.
“En Recicla Unicel fomentamos desde hace una docena de años la cultura del reciclaje del EPS. Hemos logrado establecer El Plan Nacional de Manejo de Residuos de EPS con procedimientos para que la sociedad, las empresas y los generadores se unan a los esfuerzos y ejerzan un correcto y responsable manejo de sus residuos, a fin de impactar al medio ambiente y a la economía de todas las regiones de manera positiva”.