Empresarios uruguayos verán afectados los empleos que crean debido a que la Ley de Residuos involucra un posible aumento de impuestos que serán trasladados a los precios, por lo que las fuentes de trabajo se verán mermadas.
«Con este tipo de disposiciones siempre los que se terminan afectando son los clientes», afirmó Rafael Lagos, gerente general de Casarta, empresa dedicada a la fabricación de preformas PET.
De acuerdo a algunos análisis, el aumento de precios podría estar entre un 8% y un 11%, una vez que se aplique la ley.
El senado uruguayo analiza un proyecto en el que se fijan nuevas tasas al Impuesto Específico Interno (Imesi) para importadores de ciertos productos. Por ejemplo, los productos como envases no retornables podrán tener una carga de hasta 5%, las películas de plástico, de hasta 20% y para las bolsas, vasos desechables y bandejas, podría ser de hasta 180%.
El fundamento de la iniciativa se basa en prevenir la generación y promover la valorización de recursos y plantea la llamada Responsabilidad Extendida del Productor (REP), que busca promover mejoras ambientales para ciclos de vida completos de los sistemas de los productos y extender las responsabilidades de los fabricantes del producto a varias fases del ciclo total de su vida útil, y especialmente a su recuperación, reciclaje y disposición final.