NORTEAMÉRICA, CAMBIOS SUSTANCIALES
Joel Morales, director ejecutivo de Poliolefinas de IHS Markit
El mercado del PP en Norteamérica ha cambiado bastante en el último año debido a una combinación de nuevos proyectos de capacidad anunciados por todo el mundo –con una gran concentración en China–, y una desaceleración en la demanda global.
Esta combinación ha contribuido a generar precios más competitivos del PP y oferta adecuada en la mayoría de las regiones globales. Actualmente, la principal preocupación es la incertidumbre que se tiene como resultando de la Guerra Comercial “Trade War” entre Estados Unidos y China que comenzó en el verano de 2018 y que por lo pronto, no se percibe un término firme a futuro.
Desafortunadamente, la industria Automotriz es la que sufre por la demanda del PP en 2019, comparada con la que tuvo en 2018. En Norteamérica, por ejemplo, las unidades de producción –hasta julio de 2019– estuvieron por debajo del año anterior en casi 2%.
De acuerdo con IHSM, en el 2018, alrededor del 12% de la demanda del PP se fue al sector automotriz. La incertidumbre en el mercado también ha motivado que muchos transformadores disminuyan su inventario a lo más bajo posible, lo que ha provocado una baja en el volumen de compras comparado al año anterior, de manera que la demanda de PP hasta el mes de julio de 2019 cayó 1.9% en Norteamérica.
Otro tema interesante para esta región es la llegada de una nueva planta de PP de Braskem América proyectada para arrancar en el 2020. “No hemos visto una planta nueva en la región desde que Indelpro arrancó el segundo reactor en su planta en Altamira en 2008”.
En los últimos años se observaron aumentos de la capacidad por el camino de los descollamientos que darán como resultado un aumento de 670 kton al inicio del 2020. De los 10 productores en la región, nueve han confirmado descollamientos, entre ellos Indelpro, el único productor de México que, en 2018, aumentó 100 kton de su capacidad para alcanzar un total de 690 kton.
En el periodo comprendido entre 2015 hasta 2019, la demanda crecerá 581 kton, de manera que los últimos años la región ha sido capaz de surtir su propio crecimiento gracias a los descollamientos.
La demanda para México en 2018 fue de poco más de 1.5 kton, lo que significa que tiene que importar PP para cubrir toda su demanda.
Estados Unidos es el país con la posición dominante para exportar a México, pero, debido a la volatilidad de precios de este polímero en la región, en los últimos años tanto México como Norteamérica incrementaron sus importaciones.
En la siguiente gráfica se puede observar cómo aumentó el valor de las importaciones de resinas en 2017 y también de productos terminados, como películas. Cuando el precio subió demasiado en la primera mitad de 2016, los transformadores decidieron aumentar la cantidad de importaciones, lo cual se reflejó en 2017.
En 2018 y 2019, el volumen importado de resina por México decreció, aunque no fue el caso de los productos terminados, los cuales tienen un precio que resulta de la combinación del precio de la resina y del de la mano de obra. Esta situación provocó una baja en la demanda de los productores norteamericanos.
Por otro lado, es importante resaltar el impacto de la elevada inversión en la región en producción de PE, que comenzó en 2016 y que en 2019 está llegando al máximo de la primera ola. Estas inversiones se generaron para aprovechar la ventaja del costo de “etano” que, tanto por su cantidad como por su bajo precio, coloca a la región como una de las más competitivas del mundo.
Para finales de 2019, en Norteamérica se tiene el pronóstico de agregar más de 8 kton de PE, incluyendo la planta de Braskem Idesa en México, que inició operaciones en el año 2016. Estas inversiones no han sido sólo para el mercado norteamericano, sino también para atender el mercado mundial. Para finales de 2019 se espera exportar casi el 40% de la producción mensual.
Asimismo, despierta interés que, en el período de abril a junio de este año, las exportaciones de PE de Estados Unidos y Canadá sumaron 771 kton, las cuales son superiores al promedio de la producción mensual de PP en toda la región de Norteamérica, equivalentes a 758 kton.
Este aumento del volumen de producción de PE permitirá reforzar las aplicaciones en donde se pueda usar de manera semejante PE o PP como es el caso de productos moldeados por inyección. Aunque el volumen de consumo de PP podría quedar afectado, el impacto en porcentaje es muy bajo. Sin embargo, es un factor que puede quitar un poco de demanda del PP en favor de PE.
Para el corto y mediano plazo, se espera que la oferta del PP sea adecuada, de manera que favorecerá aplicaciones que sólo requieren PP como los compuestos automotrices, películas orientadas, fibras no tejidas y tubería.