El congestionamiento vehicular en las horas pico hace de las motocicletas una opción práctica y es por esto que los cascos de Policarbonato son esenciales para garantizar la seguridad.
Como moscas, sin saber por dónde van y vienen, los motociclistas se apoderan de la carpeta asfáltica. La proliferación de estos conductores intrépidos en la Ciudad de México se debe a la saturación del transporte público y al aumento de los precios del combustible.
Estos factores han convertido a las motocicletas en una opción económica y ágil para moverse por la ciudad. Sin embargo, el número de accidentes también ha aumentado, sobre todo en casos donde los motociclistas no van protegidos con un buen casco.
Con la cabeza fría
Aunque muchos motociclistas, de manera irresponsable, optan por entrar sin casco a túneles, puentes y carreteras, es crucial ser más consciente y, al menos, temer las infracciones. Los amantes de las dos ruedas deben siempre priorizar el uso del casco.
Los cascos, como piezas de protección, han evolucionado considerablemente desde que vieron la luz por primera vez. Los más modernos incluyen características como viseras ajustables, sistemas de ventilación y tecnología de comunicación integrada.
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Un encuentro rápido, pero seguro
El primer casco de moto fue creado en 1914 por el físico británico Eric Gardner, quien lo hizo para proteger a los pilotos del TT o Tourist Trophy, una carrera de motos que se celebra en la Isla de Man, frente a la costa noroeste de Inglaterra.

En 1941, el doctor Hugh Cairns, luego de concienzudos estudios, recomendó al ejército británico el uso de casco. En el año 1973 Reino Unido y Francia adoptaron el uso obligatorio.
En los años 50, la Asociación de Fabricantes de Motocicletas (AMA) comenzó a promover el empleo de los cascos y en muchos lugares se hizo forzosa su implementación.
Estas piezas que protegen la cabeza han pasado por varias etapas de desarrollo. Desde los cascos de cáscara de nogal hasta los modernos cascos de Policarbonato (PC), de fibra de carbono y de materiales avanzados, como el Kevlar.
El súper casco
En el futuro, los cascos para motociclistas seguirán mejorando en términos de seguridad y comodidad. Por ejemplo, se espera que incorporen tecnologías avanzadas como sistemas de comunicación integrados, visores inteligentes y materiales más ligeros y resistentes.
Además, según los expertos, incluirán tecnología de punta, como una pantalla head-up display (que proporcionará al conductor información respecto del tráfico y la velocidad), comunicación con el teléfono inteligente, además de e-Call (llamada de emergencia por si se accidenta en la vía).

El secreto detrás de los cascos
La bóveda o calota exterior de un casco de moto suele estar compuesta principalmente de Policarbonato. Su proceso de fabricación es más económico, ya que basta con un molde para inyectar el polímero. No obstante, este tipo de cascos tiende a deteriorarse con mayor rapidez.
Otra variedad de casco utiliza fibra de vidrio, el material más común en la gama media, debido a su excelente relación calidad-precio. También se emplea fibra de carbono, que en estos cascos se combina en un tricomposite, una mezcla de fibra de carbono, fibra de vidrio y Aramida. Estas piezas de protección pertenecen a las gamas alta y súper alta, y solo están al alcance de unos pocos bolsillos.