Ventajas de los colores acrílicos
El acrílico brinda muchas ventajas, como añadir más pintura a una superficie ya pintada, y cubrirla por completo. Inclusive, para crear una técnica mixta con otros materiales, es muy estable, resistente a la oxidación, muy accesible en cuanto a precio y ofrece una amplia variedad de pigmentos para dotar a la más exigente paleta de colores.
De hecho, es la técnica que, de cara a su conservación, opone menos problemas. Como se sabe, el acrílico es una técnica fácil de trabajar, puede hacerse sobre cualquier soporte absorbente; directamente sobre el lienzo o sobre una base ligera de acrílico blanco titanio, técnica que permite empastes de mayor resistencia que el óleo, el cual tiende a separarse (y poblarse de grietas).
El acrílico seca de manera uniforme, sin los hundimientos que se producen en las pinturas al óleo, y por lo mismo sin cambios de color o de tono. La pintura es opaca, pero si el artista lo desea, puede diluirla hasta cualquier grado de transparencia. Hoy en día abundan los retardantes de secado que pueden ayudar a evitar inconvenientes debidos a su rápido secado y a las capas de porosidad que permiten una evaporación completa del agua.