El empaque flexible está creciendo en México, sobre todo a través del empaque de alimentos con nuevas líneas de alta barrera, tal es el caso de las películas sopladas de siete, nueve y 11 capas; así como de doble burbuja para carne, queso y productos lácteos.
El empaque secundario y terciario también se encuentra en crecimiento, principalmente a través de películas estirables que se utilizan para proteger los productos durante la transportación.
Un nuevo activo, Gulf Coast Growth Ventures (GCGV), ofrece productos como Buteno (C4) y Metaloceno (mC6) que son muy adecuados para las películas flexibles y agricultoras. Además, la tecnología de Plastómero de Poliolefina (POP) COHERE™ es muy utilizada para mejorar el sellado, típicamente para el envasado de alimentos.
Los sectores que mayor demanda de películas plásticas presentan son las industrias de empaques flexibles, envasado de alimentos y la película estirable que dentro del sector industrial tiene una gran demanda de Polietileno Lineal de Baja Densidad (LLDPE), C4 y mC6.
Te puede interesar: Amanco Wavin: líderes en sistema de tuberías plásticas
Derivado de la pandemia, el mercado de la película plástica ha cambiado conforme a las nuevas normas y por la demanda de empaque de alimentos, así como por el aumento de empaques industriales.
Uno de los desafíos que, en general, enfrenta el segmento de película plástica, es la sustentabilidad de los plásticos y la capacidad de tener una economía circular que involucre el uso de plásticos, el reciclaje y la reutilización de los productos reciclados.
Aunque se ha logrado un progreso significativo, aún hay margen para aumentar y mejorar el proceso, así como para desarrollar nuevas tecnologías para alcanzar los objetivos de sostenibilidad de la industria.