La compañía extiende sus operaciones de reciclado de PET con una tercera planta en Pensilvania, la cual se equipará con líneas de reciclado recoSTAR PET de Starlinger con una producción de 5.4 ton/hora que procesarán escamas lavadas y clasificadas en rPET apto para alimentación.
Las líneas cubrirán el rango total de flujos de materiales, desde escamas de PET transparentes y coloreadas hasta el reciclado de finos de PET (pequeñas partículas que son un subproducto del lavado y triturado).
Después de la entrega de líneas de reciclado de PET a las plantas de CarbonLITE en Riverside, California, y Dallas, Texas, ésta es la tercera colaboración entre las dos empresas.
Al respecto, Paul Niedl, director comercial de Starlinger recycling technology, aseguró: “con las primeras dos instalaciones, logramos la confianza de CarbonLITE en nuestra tecnología”.
La nueva instalación empezará a producir a principio del 2020 y convertirá anualmente más de 2 billones de botellas posconsumo. Al añadir esta planta de Pensilvania, CarbonLITE elevará el número total de botellas recicladas hasta seis billones por año.
Los principales clientes de la empresa son los productores de bebidas que buscan asegurar material reciclado cerca de sus instalaciones de embotellado en la región. El hecho de poder comprar rPET de una fuente local permite a los propietarios de marcas aumentar el uso de materiales reciclados y reducir la huella de carbono de sus botellas.