De acuerdo con Luis Francisco Ramos de Valle, investigador del Departamento de Procesos de Transformación de Plásticos del CIQA (Centro de Investigación en Química Aplicada), junto con la Cátedra Conacyt Fortalecimiento, trabajan en la unidad Monterrey del CIQA en proyectos de desarrollo de nanocompuestos retardantes de flama.
Los trabajos consisten en dar a los polímeros propiedades específicas de protección contra el fuego y de aplazamiento a la llama.
La mayoría de los plásticos son susceptibles a inflamarse, a encenderse y en muchas aplicaciones este material puede ser peligroso. Como elementos de alto riesgo, pueden ocasionar incendios en el hogar o el automóvil.
Según Edgar Nazareo Cabrera Álvarez, investigador Catedrático del Conacyt y adscrito al CIQA, unidad Monterrey, normalmente los plásticos son inflamables y, por lo general, estos polímeros necesitan de esa protección contra el fuego. Desde electrodomésticos hasta aislantes eléctricos y térmicos, así como algunos destinados a la industria de la construcción.
Sobre este tema, ambas organizaciones están sintetizando diferentes estructuras de tamaño nanométrico para ingresar a una matriz polimérica y darle esas propiedades de retardante de flama. Estos compuestos tienen que ser sustentables como aporte al medio ambiente y deben cuidar la integridad física del usuario final expuesto al fuego.