No considerada, en un principio, como una actividad esencial, la industria del Acopio y del Reciclaje se vio afectada debido a la emergencia sanitaria por COVID-19.
Bajo ese contexto, refiere Jorge Treviño, director general de ECOCE: “Tuvimos que enviar comunicados al gobierno, solicitando que se reconociera el reciclado como una forma de darle tratamiento a los residuos y eso es algo que no se debe detener al 100%”.
Nuestro entrevistado también menciona que en la Ciudad de México se suspendieron actividades en las plantas de tratamiento, puesto que “mucha de la separación de materiales se hace de manera manual y por la alta concentración de personas no era viable dejarlos con la posibilidad de contagio”.
El paro de actividades en el sector, según indica, disminuyó la tasa de recuperación de plásticos, vidrios, cartones…, por lo que es normal una caída en el acopio de los materiales reciclables.
“Todo eso nos lleva a que el abasto de las plantas recicladoras se vea disminuido; los inventarios y stocks que se tenían para continuar operación han bajado”.
Ante un escenario como este –comenta–, la reanudación de las actividades es fundamental a fin de recuperar los materiales acumulados, “sobre todo los inorgánicos reciclables, el resto de los residuos: orgánicos e inorgánicos no reciclables, o los sanitarios, tienen su tratamiento propio”.
Sobre este punto, es importante agregar que la separación de los residuos sanitarios en las zonas con mayor contagio de COVID-19 se volvió un factor clave, “cuestión que no estábamos acostumbrados y que ahora es esencial”, señala el directivo.
Prohibición de bolsas de plástico
La prohibición de bolsas de plástico desechables en la Ciudad de México: las llamadas bolsas de acarreo o bolsas de camiseta de Polietileno (PE), principalmente, entró en vigor el 1° de enero de 2020 y generó en el mercado un sinfín de confusiones.
En relación a este tema, Jorge Treviño recomienda a la industria, medios de comunicación y a la sociedad en general, leer la normatividad, puesto que, contrario a lo que muchos consideran –incluso a la fecha–, las bolsas de plástico para basura no están prohibidas.
“En la Ciudad de México no están prohibidas las bolsas de basura, están prohibidas las bolsas de acarreo, la que te daban en el supermercado y también en los tianguis para llevarte los productos”.
Esta delimitación en producción, comercialización y distribución de bolsas de camiseta, o popotes, por ejemplo, tuvo como base el abuso en su uso y consumo. No había –detalla Jorge Treviño– un plan de manejo ni un esquema de recuperación para el reciclaje.
Sin embargo, ante la pandemia de COVID-19, las autoridades en la Ciudad de México permitieron el uso de cualquier tipo de bolsa de plástico, entre ellas las que se prohibieron a inicios de este año, para el manejo de residuos sanitarios.
“Con esta crisis sanitaria tendrá que sentarse la autoridad con los diferentes sectores para hacer una buena normatividad, es decir: estos son los límites, estos son los productos que sí se pueden usar en estas ocasiones, en estos tamaños, en estos espesores o calibres, y evitar caer en el tema de las prohibiciones generalizadas”.
Oportunidades frente a la pandemia
A pesar de las críticas de grupos ambientalistas en contra del plástico –comunes el año pasado a través de redes sociales y distintos medios de comunicación–, la crisis sanitaria por COVID-19 demostró a nivel mundial la importancia de los artículos de plástico, muchos de ellos, como indica el portavoz de ECOCE, diseñados para uso sanitario.
“Son productos que no se habían tenido que utilizar y hoy la crisis ha demostrado que sí son necesarios; el popote fue diseñado para un uso sanitario: imagínate todos los contagiados de COVID-19 tomando en el mismo vaso”.
Con respecto a las resinas vírgenes y el material reciclado, subraya que debido a la caída del precio de petróleo habrá una gran competencia entre ambas, posicionándose el material virgen por encima del material reciclado, el cual tiene sus propios costos.
Sin embargo –apunta–, para preservar el medio ambiente será clave la reflexión del consumidor en cuanto a lo que es necesario y no, y en lo concerniente al consumo responsable y racionado.
Proyecciones a mediano plazo
La crisis económica, coinciden los expertos, se reflejará en todos los sectores, principalmente en el consumo, que va a la baja debido al desempleo. Esto, de alguna manera, impacta en el crecimiento de la Industria del Plástico, aunque también hay factores que juegan a favor, como la demanda creciente de aplicaciones médicas, entre otras.
En este sentido, Jorge Treviño, subraya: “En el mejor de los casos me atrevería a decirte que el plástico tiene cosas a favor y cosas en contra, sobre todo el consumo, el tener materias primas baratas juega a favor, la necesidad y utilidad de los productos plásticos, eso también está a favor del plástico, pero desgraciadamente la crisis económica, el desempleo, va a limitar el consumo, y ese consumo se va a reflejar en todos los sectores”.
Situación del PET
México destaca por encima de Estados Unidos y Europa en reciclaje de PET (Polietilén Tereftalato). Como se ha demostrado ya desde hace muchos años, el PET desarrolla una industria nacional de reciclado que genera diferentes tipos de productos, lo que, según enfatiza el ingeniero, le da cierta estabilidad al reciclaje y al consumo de este material como reciclado.
“La tasa de acopio se verá afectada por falta de recuperación; al margen de esto, se registra un mayor crecimiento en la industria nacional que en la exportación, aunque con la devaluación del peso frente al dólar se vuelve muy atractivo exportar, el tema es que los mercados internacionales no están abiertos, entonces aunque haya un dólar muy atractivo para exportar no hay mercados internacionales para hacerlo, China no está abierto, Taiwán está cerrando, hay más limitaciones en Europa”.
De las 800 mil toneladas (Tons) que se consumen en México de PET, una parte ya ha sido sustituida por el material reciclado. Según informes de ECOCE, de esas 800 mil toneladas, aproximadamente 100 mil Tons ya son de reciclado y las otras 700 de producto virgen con una tasa de recuperación arriba del 53%.
300 mil caretas donadas al sector médico
En función de abastecer a médicos y personal del sector salud –muchos de los cuales han tenido que pagar sus equipos de protección contra el COVID-19–, ECOCE donó 300 mil caretas hechas de material 100% reciclado con lámina de grado, prácticamente alimenticio.
Cabe mencionar que para la elaboración de las láminas empleadas para la manufactura de las caretas se utilizaron 1 millón y medio de botellas post-consumo.
“En un principio pensamos ayudar a más funcionarios públicos, pero consideramos que los que más necesitan son los hospitales y los médicos; estas caretas se están distribuyendo no sólo en la Ciudad de México, sino en el interior de la República, usando el rankeo de contagios que hace el gobierno en su página del COVID-19”.