Berry Global abrió las puertas de su “Centro Circular de Innovación y Formación” en Tulsa, Oklahoma, Estados Unidos.
Con una extensión de 12 mil pies cuadrados, las instalaciones acelerarán el desarrollo de productos innovadores impulsados por la ciencia y la ingeniería de materiales superiores, además de que busca fomentar un espacio colaborativo para la capacitación de profesionales.
Uno de los principales objetivos del nuevo centro es incubar proyectos de película estirable que ayuden a mantener los materiales en la cadena de valor y lejos del medio ambiente.
En busca de películas más livianas
La gama Bmore de Berry incluye productos con contenido reciclado, contenido renovable, diseño para la reciclabilidad, huella de carbono reducida, así como soluciones de recarga/reutilización.
El nuevo centro estimulará el desarrollo de películas estirables más livianas, que requerirán menos material y energía para su producción y, por lo tanto, reducirán las emisiones de gases de efecto invernadero y los desechos plásticos.
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Las instalaciones de Tulsa utilizarán tecnología de caracterización y pruebas de rendimiento para medir las propiedades y el comportamiento de las películas estirables, incluido el peso, el alargamiento, la resistencia al desgarro, la relación de preestiramiento, la memoria de la película y muchos otros.
Capacitación con enfoque en las películas plásticas
«El nuevo centro de Berry también fomentará un espacio colaborativo de capacitación para ayudar a nuestros clientes a resolver las complejidades y comprender lo que es posible para el mercado de películas», dijo un portavoz de la compañía.
Los distribuidores podrán unirse a sesiones educativas y de capacitación, que cubrirán temas como Stretch Film 101 y Wrapping Dynamics and Optimisation, entre otros.
«Ahora más que nunca, la capacidad de acceder a películas premium con rendimiento personalizado y beneficios de circularidad es crucial para nuestros distribuidores, ya que se esfuerzan por satisfacer las cambiantes demandas de sostenibilidad de los consumidores y del mercado en general», dijo Phil Stolz, vicepresidente ejecutivo y director general. para Flexibles en Berry.
«Este nuevo centro representa una inversión significativa en educación, tecnología y sostenibilidad para ayudar a nuestros clientes a resolver las complejidades y comprender lo que es posible para el mercado de envases flexibles».
En Estados Unidos se utilizan cada año entre 12 y 15 mil millones de libras (5,400 a 6,800 toneladas) de empaques y películas flexibles, para productos que van desde envoltorios para paletas hasta envíos publicitarios para comercio electrónico, envoltorios para botes, empaques de alimentos, envoltorios retráctiles, césped y jardín. bolsas y envoltorios para fardos de heno. Sin embargo, se estima que solo el 5% de las películas flexibles se reciclan cada año y el resto se deposita en vertederos, se incinera o se libera al medio ambiente.
