Por fortuna, esta condición duró un lapso muy corto, según refiere, puesto que, dentro de los electrodomésticos, se empezó a disparar el consumo a partir de necesidades específicas: aparatos de primera necesidad, como refrigeradores, electrodomésticos, aires acondicionados…, “la demanda creció en la segunda etapa de la pandemia y, ahora, en la tercera etapa, estamos aprendiendo a convivir con el virus”.
No obstante, a pesar de que se percibe ya una dinámica económica en recuperación, la radiografía total no será positiva como otros años, tomando en cuenta la contracción del mercado por crisis sanitaria. “Calculamos que algunos sectores estarán 25-30%, incluso un 40% por debajo de lo que fue el año pasado o antepasado”.
Por otro lado, “el plástico es, ha sido y seguirá siendo importantísimo”, apunta Enrique Buchanan. En los electrodomésticos, en concreto, “los plásticos son importantes por su constitución y calidad, y porque son la cara del producto terminado, lo que ha hecho que la Industria del Plástico eleve sus estándares y sus procesos a un nivel muy alto”.
Frente al T-MEC –explica–, las oportunidades son importantes, pues, independientemente de las pautas establecidas en el tratado, uno de los objetivos del CLELAC es fabricar electrodomésticos con un contenido nacional del 100%.
“Nosotros estamos convencidos en crear productos de alta calidad, de alta gama, durables, y el productor nacional lleva una ventaja importante, el productor local ha sido suficientemente competente para sustituir cualquier importación”.
El Clúster de Electrodomésticos apuesta por la reactivación a través de su 7º Encuentro de Negocios, ENCLELAC, el cual se llevará a cabo de forma virtual el próximo 30 de septiembre. El evento promoverá la vinculación comercial de la industria de Electrodomésticos con nuevos y actuales proveedores.
