Es esencial llevar a cabo un análisis de ciclo de vida para comparar el rendimiento medioambiental de materiales alternativos para las diferentes aplicaciones de envases, dicen los investigadores.
En el caso de los plásticos, se ha demostrado que el reciclaje ahorra entre el 30% y el 80% de las emisiones de dióxido de carbono que generan el procesamiento y la fabricación de plásticos vírgenes. Si todo el plástico se reciclara, se podrían ahorrar anualmente de 30 a 150 millones de toneladas de CO2, lo cual equivale a suspender entre 8 y 40 centrales eléctricas de carbón en todo el mundo.
Con la aplicación generalizada de las estrategias de gestión de las energías renovables y la demanda, el aumento del reciclado de los plásticos asume el potencial de frenar las crecientes emisiones de gases de efecto invernadero del ciclo de vida de los plásticos y evitar que ingresen al medio marino, añade el informe, el cual se puede consultar en el siguiente enlace: https://pieweb.plasteurope.com/members/pdf/p245616b.PDF.
Análisis global de los plásticos por mercado final
En un artículo publicado por Science Advances, en julio de 2017, titulado “Producción, uso y destino de todos los plásticos jamás fabricados”, los autores llevaron a cabo un análisis para identificar y sintetizar muchos de los datos que se encuentran dispersos sobre la producción, el uso y la gestión al final de la vida útil de los plásticos, fibras y aditivos: “Estimamos que hasta la fecha (2015), se han producido 8,300 millones de toneladas (Mt) de plásticos y se generaron aproximadamente 6,300 Mt de residuos plásticos, de los cuales, alrededor del 9% fueron reciclados, el 12% incinerados y el 79% acumulados en vertederos o en el medio natural. Si las tendencias actuales de producción y gestión de residuos continúan, aproximadamente 12,000 Mt de residuos plásticos se amontonarán en vertederos o en el medio natural para 2050”, anticipa.
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Sin duda, el mercado más grande de los plásticos es el de los envases, una aplicación cuyo crecimiento se aceleró por un cambio global de los contenedores reutilizables a los de un solo uso. Como resultado, la proporción de plásticos en los residuos sólidos urbanos aumentó del 1% en 1960 a más del 10% en 2005, en los países desarrollados. Al mismo tiempo, la generación mundial de residuos sólidos, fuertemente correlacionada con el ingreso nacional bruto per cápita, ha crecido constantemente en las últimas cinco décadas. Esta tendencia se acentuó aún más como efecto de la pandemia.
El punto de partida del modelo de producción de plástico que utilizaron los autores del artículo citado, son los datos anuales de producción anual de polímero puro (resina), de 1950 a 2015, publicados por el Grupo de Investigación del Mercado de “Plastics Europe”, y los datos anuales mundiales de producción de fibra de 1970 a 2015, publicados por The Fiber Year y Tecnon OrbiChem. Tras una serie de ajustes estadísticos, lograron generar los siguientes resultados:
- La producción mundial de resinas y fibras aumentó de 2 Mt en 1950 a 380 Mt en 2015, una tasa de crecimiento anual compuesto (CAGR) del 8.4%, aproximadamente 2.5 veces el CAGR del producto interno bruto mundial durante ese período.
- La cantidad total de resinas y fibras fabricadas desde 1950 hasta 2015 es de 7,800 Mt.
- La mitad de esto —3900 Mt— se produjo en los últimos 13 años.
- Hoy en día, sólo China representa el 28% de la resina global y el 68% de la producción mundial de fibra de PP (Polipropileno). Los plásticos de base biológica o biodegradables que en 2015 alcanzaban una capacidad de producción global de 4 Mt y están excluidos de este análisis.
Los autores explican: “recopilamos estadísticas de producción de resinas, fibras y aditivos de una variedad de fuentes de la industria y las sintetizamos según el sector de tipo y consumo. Los datos sobre la producción de fibra y aditivos no están fácilmente disponibles y normalmente se han omitido hasta ahora”.
