En todo el mundo, la responsabilidad ambiental se ha convertido en un pilar esencial para los negocios, y los consumidores cada vez priorizan más a las empresas que apuestan por la sostenibilidad. En el marco del Día Mundial de la Conciencia Ambiental, ALPLA reafirma su compromiso con un futuro más verde, destacando el impacto positivo del reciclaje de plásticos en la protección del medio ambiente y la importancia de generar conciencia ecológica.
En México, Centroamérica y el Caribe, la gestión adecuada de residuos plásticos es crucial, debido al alto volumen de desechos. Según la Asociación Nacional de Industrias del Plástico (ANIPAC), solo el 25% de los plásticos posconsumo en México se reciclan, lo que evidencia un gran potencial de crecimiento en la industria del reciclaje. Aumentar esta tasa no solo disminuiría los residuos en vertederos y océanos, sino que también traería beneficios económicos, como la creación de empleos locales.
Cada día, 54 millones de personas en esta región utilizan productos de ALPLA en diversas presentaciones, desde botellas de agua hasta envases de detergente. En este contexto, el reciclaje de plásticos se posiciona como una herramienta clave para mitigar los efectos del consumo masivo. ALPLA ha sido pionera en soluciones innovadoras, transformando residuos plásticos en productos reciclados de alta calidad, que reducen tanto la huella de carbono como la dependencia de recursos vírgenes.
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«Cada tonelada de plástico reciclado ahorra hasta un 80% de energía en comparación con la producción de plástico nuevo», señaló Carlos Torres Ballesteros, director general de ALPLA para México, Centroamérica y el Caribe. «Nuestro objetivo es claro: crear envases que no solo sean útiles y accesibles, sino que también impulsen una economía circular y fomenten un mundo más sostenible».
El reciclaje de plásticos no solo preserva los ecosistemas, sino que también genera importantes beneficios económicos. Las dos plantas de reciclaje de ALPLA en México procesan 50,000 toneladas de PET posconsumo cada año, fortaleciendo la economía circular y generando empleo para más de 3,500 colaboradores en la región, de los cuales 578 se dedican exclusivamente a la división de reciclaje. Esta labor contribuye a la reducción de gases de efecto invernadero y ayuda a mitigar el cambio climático.
Estas plantas transforman los residuos plásticos en resinas recicladas de alta calidad, utilizadas para fabricar nuevos envases, cerrando así el ciclo de vida de los productos plásticos y reduciendo el uso de materiales vírgenes.
“Creemos que la conciencia ambiental debe integrarse en cada etapa de producción. Desde el diseño hasta el reciclaje, buscamos que nuestros productos no solo cubran las necesidades del consumidor, sino que también contribuyan a un entorno más saludable para las futuras generaciones”, destacó Carlos Torres.
ALPLA no limita sus esfuerzos de sostenibilidad a una sola región. A nivel global, la compañía recicla y produce 350,000 toneladas de resina reciclada al año, procesando 30 millones de botellas al día. De esta cantidad, 266,000 toneladas corresponden a rPET y 84,000 toneladas a HDPEr. Con 13 plantas de reciclaje en todo el mundo, ALPLA reafirma su compromiso con la protección del planeta y la creación de un futuro más limpio. En los últimos cinco años, ha reducido su huella de carbono en un 20% y ha incrementado el contenido reciclado en sus productos en un 30%.
En este Día Mundial de la Conciencia Ambiental, se resalta la importancia de la colaboración entre la sociedad y las empresas de reciclaje para generar un verdadero impacto ambiental. Mediante campañas educativas, incentivos y una infraestructura adecuada, se puede lograr un cambio positivo tanto en el medio ambiente como en la calidad de vida de las comunidades. La clave es la participación activa y el compromiso compartido hacia un futuro más sustentable.
Para más información sobre las iniciativas de reciclaje de ALPLA, visita www.alpla.com.
