España es el primer país productor de aceite de oliva del mundo, con una importante generación de residuos procedentes del deshuesado del fruto. Hasta ahora, este desecho se destinaba a su valorización energética mediante incineración.
No obstante, Aimplas (Instituto Tecnológico del Plástico) y Olipe (Olivarera de los Pedroches), llevan a cabo el proyecto GO-Oliva que desarrollará una aplicación de alto valor agregado a este residuo para la fabricación de nuevos envases de plástico sostenibles, que serán utilizados para el propio aceite y sus derivados.
Se trata de Oliplast, un nuevo material plástico compuesto biodegradable, compostable y procedentes de fuentes renovables: Una carga o refuerzo del aceite de oliva y un material termoplástico.
Este plástico podrá ser procesado mediante extrusión o inyección para la elaboración de nuevos productos, como una bandeja o plato para apoyar la botella, y tapones para envases de cremas cosméticas elaboradas con aceite de oliva.
Actualmente se trabaja en la selección de las materias primas y en el desarrollo de la harina de hueso para la obtención del nuevo material. Posteriormente, se llevará a cabo un estudio de comportamiento y validación para los procesos de transformación. Finalmente, se analizará su compostabilidad y se realizará un estudio medioambiental.
GO-Oliva se enmarca en la convocatoria de ayudas para proyectos innovadores a ejecutar por Grupos Operativos (GO) supra-autonómicos de la Asociación Europea para la Innovación (AEI-Agri), dentro del Programa Nacional de Desarrollo Rural 2014-2020 (FEADER) para el año 2019.
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