Repsol llevó a cabo, con éxito, la primera producción de copolímeros de alto impacto (TPOs), que complementa su oferta de Polipropileno (PP). Es la primera vez que se produce un PP de estas características en la Península Ibérica. Esta nueva gama se comercializará bajo la marca Repsol ImpactO.
Los nuevos materiales se destinarán, como neat PP o como base para compuestos con altos requerimientos de impacto, para los mercados automotriz, piezas técnicas y compounders.
La compañía española busca con esta incorporación apoyar, por una parte, a sus clientes del sector automotriz y a las OEM, ofreciendo una nueva alternativa como proveedor de este tipo de materiales de altas prestaciones mecánicas.
Este logro es resultado del actual plan de inversiones englobado dentro de la estrategia de diferenciación del negocio químico que la compañía lleva impulsando los últimos años.
Además, la firma europea contempla ampliar esta gama en un futuro, con grados de alto impacto a bajas temperaturas, que se destinará a piezas para el interior del automóvil, como paneles de puertas o salpicaderas, y otros objetos cotidianos como carritos de la compra, maletas o sistemas de retención infantil para automóviles y bicicletas.