A partir de 2025, las empresas deberán comenzar a implementar el pasaporte digital para productos plásticos, una iniciativa que será obligatoria para comercializar productos en la Unión Europea. En este contexto, AIMPLAS, Instituto Tecnológico del Plástico, ha desarrollado un innovador tótem digital que actúa como demostrador de esta herramienta, anticipando los beneficios y requerimientos de esta tecnología que marcará el futuro de la sostenibilidad y la trazabilidad en la industria.
¿Qué es el pasaporte digital para productos plásticos?
El pasaporte digital es una solución diseñada para ofrecer a consumidores e industrias información detallada y verificada sobre la trazabilidad, materiales, reciclado y huella de carbono de los productos. Esta herramienta garantiza que los productos plásticos cumplen con todas las normativas europeas, promoviendo la sostenibilidad y facilitando un consumo más informado y responsable.
A través de un diseño interactivo, el tótem digital de AIMPLAS incluye ejemplos como una tarrina de helado de supermercado y una casa de juguete. Ambos productos demuestran cómo el pasaporte digital puede detallar datos clave como el contenido reciclado (más del 70% en ambos casos), el ciclo de vida del producto, y recomendaciones para un manejo sostenible. Además, estos ejemplos refuerzan las prioridades del Reglamento de Ecodiseño de Productos Sostenibles de la Comisión Europea.
Innovación y compromiso con la sostenibilidad
El tótem digital funciona como una pantalla interactiva equipada con lectores de códigos y etiquetas, permitiendo a los usuarios explorar de manera visual la información que cada producto podría incluir en su futuro pasaporte digital. Los datos integrados abarcan desde la procedencia de los materiales hasta las opciones de reciclado y su impacto ambiental, fomentando la transparencia y sensibilizando a consumidores e industrias.
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Este demostrador, creado con el apoyo del Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial (IVACE) y fondos de la Generalitat Valenciana, es un paso crucial en el avance hacia la economía circular. Además, forma parte de la línea de Economía Circular promovida por AIMPLAS y cuenta con la colaboración de empresas como ITC Packaging y Famosa, quienes aportaron información técnica clave para el desarrollo de los casos prácticos presentados.
Beneficios del pasaporte digital para consumidores e industrias
El pasaporte digital no solo garantizará el cumplimiento de normativas, sino que ofrecerá una experiencia de compra más transparente, sostenible y segura. Los consumidores podrán acceder a:
- Trazabilidad completa: desde el origen de los materiales hasta las opciones de reciclado.
- Información verificada: detalles sobre composición, fecha de fabricación, instrucciones de uso y garantías.
- Impacto ambiental: datos sobre huella de carbono, reciclabilidad y contenido reciclado.
Por otro lado, las empresas podrán demostrar su compromiso con el medio ambiente y adaptarse a los nuevos estándares de sostenibilidad, diferenciándose en un mercado cada vez más exigente.
Un avance hacia la economía circular
El desarrollo del pasaporte digital se alinea con los objetivos definidos por la Comisión Europea para el Reglamento de Ecodiseño de Productos Sostenibles, que incluye categorías como textiles, juguetes, envases y productos intermedios como plásticos y polímeros. Además, se enfoca en tres requisitos clave: durabilidad, reciclabilidad y contenido reciclado.
Con esta herramienta, AIMPLAS refuerza su liderazgo en innovación y sostenibilidad, sentando las bases para una industria plástica más transparente y respetuosa con el medio ambiente. Este proyecto no solo anticipa el futuro de los productos plásticos en Europa, sino que también educa y sensibiliza sobre la importancia de adoptar hábitos responsables para proteger nuestro entorno.