Cuando comparamos la adopción tecnológica en manufactura, Brasil, a diferencia de México, destaca por la automatización que la inteligencia artificial (IA) ofrece a sus procesos productivos industriales. Estos cambios impactan, específicamente, en el cliente. Con dicha innovación, se logra una experiencia más personalizada.
Los países que buscan ser parte de la transformación aprenden de las tendencias globales. Sin embargo, el ciclo Industria 4.0. sólo puede completarse en colaboración entre sociedad y gobiernos, y entre los distintos sectores a nivel empresarial.
Bajo ese contexto, la educación es un tema clave. En función de fortalecer las actividades económicas, se debe atender, particularmente, la capacitación de padres y maestros, los dos grandes pilares de la sociedad.
Como enfatiza Adriana Torres, directora general de TCS, las multinacionales encuentran marcadas diferencias entre un joven ingeniero hindú y un mexicano recién egresado de la facultad. El primero, completa, en seis horas, la manufactura de un producto, mientras que, el segundo, lo hace en tres días.
De acuerdo con nuestra entrevistada, el perfil destacado entre uno y otro profesional, más que un tema de coeficiente intelectual (IQ), se relaciona, directamente, con la educación, puesto que en la India enseñan, desde primaria, matemáticas avanzada y lenguaje de programación.
En consecuencia, y a fin de potenciar el desarrollo social y económico en nuestro país, el método tradicional educativo se debe atender con innovación.
¿El triunfo de la IA?
En el mundo convivirán doctores y robots. La colaboración entre ambos permitirá un trabajo más preciso. Para ajustarse a las nuevas condiciones del mercado, se debe promover el desarrollo de universidades multidisciplinarias.
“Que el robot desplace al ser humano es un mito. Las compañías deben ofrecer al personal entrenamiento para nuevas operaciones. Especulaciones como ésas también se propagaron durante la primera Revolución Industrial. Se creía que el vapor, o en su defecto, el ferrocarril, sustituiría al capital humano”.
Adicionalmente, destacó que en México los retos no son empresariales, propiamente dichos, sino de carácter académico. Además, “mientras no se cambie la manera de operar en el país no habrá transformación”.
Si bien es cierto que la tecnología puede generar problemas sociales de importancia mundial, no es una herramienta con sistema de perfil avanzado que funcione por sí misma. Al final, sus tareas y actividades, las decide el ser humano.
Transición en la logística
Las industrias migran de robots mecánicos a robots con IA. Seguros, bancos y retail se suman también a la transformación. El propósito de éste último sector es competir contra multinacionales, como Amazon y Mercado Libre, entre otras, que sin contar con activos, comercializan a gran escala.
En la actualidad, las compañías pueden expandir sus alcances de distribución y monitorear la carga en tiempo real, puesto que con IA es posible interconectar el ecosistema que compone toda la cadena de suministro.